A veces es mejor salir al mundo y dejar caer la lluvia, aunque te empapes un poquito. Y es en esos momentos donde lo más productivo es caminar hacia delante y hacer las cosas cómo mejor se pueda. Momentos, por ejemplo, en los que una idea brillante no encuentra un cauce para desarrollarse.
Y de paso, seguir poniéndose guapa. Desde que descubrí Chanel este verano, mi concepto de belleza ha cambiado radicalmente. La femineidad es la esencia de la belleza.
2 comentarios:
Me gusta tu metáfora de caminar sobre la lluvia, aunque a mí además me encanta hacerlo de verdad. Un besito!
Estoy últimamente algo metafórica... Un besito Addict. Y gracias por leer mi blog.
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